Muchos olivicultores en La Rioja todavía cultivan para autoconsumo y tienen necesidades de asesoramiento, formación y apoyo
La Rioja todavía quedan muchas parcelas pequeñas destinadas al cultivo de olivar, poco rentables. Los nuevos modelos productivos están completamente mecanizados, con plantaciones en seto, en dos dimensiones (parecidas a la espaldera de la viña o a los frutales como el manzano o el cerezo), sostenibles y con mayor rendimiento.
A nivel general no están instaurados, pero sí en fincas medianas y grandes como en Quel, Calahorra o Alfaro. Este asunto y otras cuestiones relacionadas con el olivar se abordan en el curso impartido por UPA Rioja en Corera. Patricio Villalba (Product Manager de Agromillora) es el profesor de este curso que se ofrece anualmente en diferentes lugares (en 2020 fue en Murillo de Río Leza).
A día de hoy los pequeños agricultores demandan unas necesidades de asesoramiento, de formación y apoyo que les ayuden a afrontar los retos del cambio climático. En ese sentido, Villalba destaca los problemas de las plagas, la restricción de agua y la fertilización como sus principales dificultades. Respecto a la elaboración, el experto indica que la DOP Aceite de La Rioja «está haciendo un papel muy bueno en promocionar el aceite de oliva y darlo a conocer a nivel de consumidor. Defiende un modelo de aceites de calidad» y añade:
«Es verdad que queda mucho por hacer. Somos el primer país productor de aceite del mundo y, en cambio, ni nosotros mismos tenemos la cultura para distinguir bien lo que es un virgen extra, de un aceite de orujo o un virgen. Hay mucha confusión con la terminología».
Muchos agricultores todavía no han entrado en la DOP porque hay muchas parcelas de autoconsumo. Hay trujales pequeños y medianos en los que lo que obtienen los olivicultores es para casa o para un mercado, un consumo muy local. Aparte de la viña, hoy en día el almendro y el avellano pueden tener bastante futuro como alternativa al olivo. «Al olivar le veo futuro siempre que hagamos plantaciones más mecanizadas y diferenciando el producto con marcas de calidad. Me parece genial apostar por la DOP Rioja y que hay que envasar, en vidrio preferiblemente. Si es así, se podrá vender el aceite, porque si nos vamos a granel o garrafas es muy difícil competir con Andalucía o Extremadura, regiones que por superficie tienen una productividad mucho más alta y pueden vender más barato», termina Villalba.
Sanda Saiz, La Rioja
