Ciruelos
Ciruelos d'Agen en Seto
El cultivo del ciruelo en Chile para la deshidratación se basa principalmente en la variedad D’ Agen cultivada en una copa tradicional con marco de plantación de 5 a 6 m entre líneas y de 3 a 5 m entre árboles.
Objetivo
La producción eficiente y sostenible basada en el uso equilibrado de los insumos en el proceso productivo, en particular la mano de obra, el agua y los fertilizantes.
Bases del Modelo en Seto
La variedad D’Agen
- Es la más importante entre las variedades cultivadas en Chile por las características del fruto, la calidad gustativa y la doble aptitud en fresco o deshidratado.
El patrón Rootpac 20
Obtenido por Agromillora, confiere un vigor controlado de forma natural y una buena adaptación a un amplio rango de suelos, en especial los más pesados. El control del vigor resulta clave para disponer de copas de pequeño volumen fácilmente mecanizables y eficientes en la captación de luz.
Conducción en seto
Como sistema de formación de pequeño volumen y forma bidimensional . Adaptado a la mecanización de la poda y de la recolección con máquinas cabalgantes utilizadas en viña, olivo y almendro.
El período de formación es de 3 años, con podas totalmente mecánicas. La plena producción se alcanza a partir del 5 año con cosechas 100% mecánicas.
Los marcos de plantación oscilan de 3,0 a 3,5 m entre líneas y de 1,0 a 1,5 m entre árboles. Ello equivale a densidades de plantación de 3.333 a 1905 árboles/ha. La distancia de las ramas más bajas del suelo no deberá ser inferior a 50 cm para facilitar la recolección y evitar pérdidas de frutos por el paso de la máquina cabalgante.
Con el modelo en Seto se obtiene un mejor aprovechamiento de los productos fitosanitarios además, de un uso eficiente de los recursos hídricos y una disminución en la Huella de Carbono.
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Los datos y resultados que se muestran en estos recursos gráficos se hacen sólo con fines informativos y no se garantiza que se alcancen en todos los casos, debido a diversos hechos que influyen en el crecimiento de las plantas, como las circunstancias climáticas y geográficas, las características del suelo, así como las condiciones de uso y los hábitos agrícolas.