Una óptima gestión de los campos de planta madre garantiza la calidad sanitaria y genética de los materiales vegetales.
Una gestión que basamos en tres importantes factores:
La trazabilidad por código de barras.
El aislamiento de los campos de planta madre de plantaciones comerciales vecinas, reduciendo al mínimo los posibles riesgos de contaminación.
El exhaustivo plan de control interno, así como la gestión de los requerimientos de las administraciones públicas locales.