Mauricio Zúñiga participó de una interesante visita a olivareros de la Región metropolitana y la sexta Región en compañía de Chile Oliva y el grupo de Transferencia Tecnológica de Olivos, el cual está integrado por los principales olivicultores de Chile.
Durante esta visita, exploraron campos que manejan entre 450 y 3000 hectáreas de olivos con diversas densidades, que incluían sistemas superintensivos y tradicionales. Estas empresas olivicultoras, Palmas de Llancay, Agroreservas Chile, Deleyda y Olivos del Sur, ya tienen entre los 12 y 18 años de plantación, y se enfrentan a importantes desafíos técnicos de los huertos, principalmente con las podas, que cumplen la importante misión de renovación y tener estructuras vegetales delgadas para mejorar la eficiencia productiva con menos agua.
El propósito principal de la visita fue observar y comprender los sistemas de poda utilizados, en especial, cómo se renuevan los huertos a través de las prácticas de poda y cómo se perfeccionan estas técnicas con mecanización. Durante el último año, ha habido numerosos debates sobre este tema, pero los olivicultores han comenzado a comprender la importancia de podar los olivos anualmente. Esto permite mantener árboles delgados y permeables a la luz, lo que fomenta el crecimiento de ramificaciones internas que permiten producciones más estables a lo largo del tiempo con un mejor aprovechamiento del agua.
Un aspecto crucial de la visita fue examinar el proceso de floración. Este año, debido a un invierno y primavera irregular, que presentó baja acumulación de horas frío, lluvias y menor temperatura, se ha producido un retraso de al menos 10 a 12 días en comparación con el año anterior, además de floraciones y cuajas muy heterogéneas. Esto ha afectado particularmente a los olivos en la zona norte, donde la floración ha sido deficiente, lo que probablemente resultará en una importante disminución en la producción. Fenómeno que se evaluará próximamente.
Adicionalmente, se constató que se estaban realizando riegos deficitarios, con muy poca cantidad de agua en la región. El campo de Agroreservas se ha visto limitado por la disponibilidad de agua y ha tenido la obligación de regar mucho menos de lo necesario que un huerto sin restricciones hídricas, el riego ha sido considerablemente bajo en comparación con los huertos normales, que riegan entre 2800 a 4000 metros cúbicos por hectárea. Esta situación los llevó a implementar prácticas de poda para reducir la transpiración de los árboles, mejorar la eficiencia del agua con el objetivo de seguir siendo rentables.
En la actualidad, las noticias comerciales son excelentes, el precio del aceite de oliva se encuentra en niveles históricamente altos, oscilando entre 7 y 8 dólares por kilo, lo que representa un aumento significativo con respecto a los precios de hace 7 u 8 años. Es probable que esta tendencia se mantenga en torno a los 5 dólares en los próximos años, lo que ha generado satisfacción entre los olivicultores, especialmente aquellos que producen aceite a granel. Esto ha impulsado una tendencia a renovar huertos envejecidos y a establecer nuevas plantaciones con alta densidad, principalmente debido a los beneficios en términos de costos y la posibilidad de realizar cosechas mecánicas.
Después de 15 años, se ha demostrado que los sistemas de alta densidad son mucho más eficientes y requieren un menor consumo de agua, lo que se traduce en una reducción de los costos operativos anuales.
